Testiculo no descendido
La criptorquidia, o el testículo no descendido, es la anomalía más común del desarrollo sexual masculino, por lo que los pacientes afectados representan un número alto de atenciones en la consulta de urología pediátrica. El diagnóstico y tratamiento tempranos son esenciales para el manejo satisfactorio de esta condición.
Los testículos se encuentran dentro del escroto. Antes de que el niño nazca, sus testículos se encuentran en la cavidad abdominal.
Justo antes de nacer, los testículos bajan hasta el escroto. Si esto no sucede, nos encontramos ante unos “testículos no descendidos” o “criptorquidia”. Esta puede suceder unilateral o bilateral.
La mayoría de las veces, el médico detecta el problema al hacer un examen del bebe inmediatamente después de su nacimiento. Es más común en bebés prematuros .
En la mayoría de los casos, no se necesita ningún tratamiento, porque los testículos bajan al escroto unos meses después del nacimiento. Si eso no sucede, el tratamiento por lo general se trata de una cirugía para mover el o los testículos hacia el escroto. La cirugía puede realizarse tan pronto como sea posible después de que el niño cumpla seis meses de edad y debe realizarse antes de que cumpla año de vida . Esta puede ser vía abierta , vía laparoscópica o video asistida dependiendo de la localización del testículo.
El problema de criptorquidia es común y su diagnóstico temprano es esencial para el tratamiento efectivo de los pacientes afectados. La cirugía correctiva antes del año de vida puede prevenir los efectos a largo plazo relacionados con infertilidad y riesgo de malignidad. En este sentido, el médico pediatra tiene la responsabilidad de identificar esta condición, orientar a los padres y referir al paciente tempranamente al urólogo pediatra para una evaluación y un tratamiento especializado. De esa forma, se puede corregir una condición en la que el tratamiento generalmente es favorable.